Así lo expreso Anatolio Santos, secretario de Desarrollo Económico del Atlántico después que entidades como el Instituto Colombiano Agropecuario (ICA), Corporación Autónoma Regional del Atlántico (CRA) y Asoganorte, presentaron los resultados relacionados con la muerte de reses en el Embalse el Guájaro.
40 reses fallecieron por la contaminación de las aguas del Embalse y porque el PH del líquido no era el adecuado.
Para estas entidades involucradas en el estudio, las muestras de agua contenían altos niveles de nitrógeno amoniacal, lo cual está asociado al vertimiento de aguas servidas; el fósforo presente se halló en niveles elevados, lo que facilitó la proliferación de cianobacterias y el oxígeno disuelto en uno de los puntos donde se tomó la muestra es bajo, mientras que en otros dos puntos estudiados es elevado.
Ante esta situación, el secretario de Desarrollo Económico del Atlántico, Anatolio Santos Olaya, manifestó que “se solicitará formalmente a las alcaldías municipales (Manatí, Luruaco, Sabanalarga y Repelón y a la Agencia Nacional de Tierras), para la supervisión y control en el traslado de cercas por fuera de jurisdicción de los predios, para evitar el acceso de animales a las áreas de riesgos de contaminación debidamente identificadas.
Asimismo, el funcionario indicó que “se realizarán campañas preventivas con los productores ganaderos en la zona al margen de la Ciénaga del Guájaro y los cuerpos de agua del Atlántico sobre la dinámica biológica, física y química relacionada con riesgo de contaminación (…).
Se va a promover la vinculación de los productores aledaños a los cuerpos de agua y al Guájaro, así como a las asociaciones de productores adscritas al programa Megaleche, a fin de vincularlos a las actividades de acompañamiento para el manejo tecnificado de los hatos ganaderos”.
Por su parte, la bióloga Ayari Rojano, sostuvo que “la CRA realizó la toma de muestras de agua en tres puntos del Embalse El Guájaro y dicho estudio arrojó las variables de: Oxígeno, PH; turbiedad; temperatura, conductividad, nitritos, nitrato, nitrógeno amoniacal, plaguicidas, fósforo, fosfatos y fitoplancton alterados.
Recomendó la revisión técnica y las actividades llevadas a cabo en el predio donde sucedieron los hechos, que son motivos de investigación, ya que fue el único sitio donde se registraron muerte de reses.
Texto y foto: José Zuluaga Jiménez