El calor residual, generado por el funcionamiento de aparatos domésticos y maquinaria diversa, puede ser convertido en electricidad de forma más eficiente por medio de materiales ultradelgados, gracias a una nueva investigación desarrollada por la Universidad de Warwick en Reino Unido y colaboradores de las universidades de Cambridge y Birmingham
Inicialmente los investigadores estaban tratando la cristalización de telururo de estaño en nanotubos. Estos se utilizan como plantillas para la formación de láminas ultradelgadas de ese material.
Posteriormente, pudieron no solo establecer una dependencia directa entre el tamaño de una plantilla y la estructura resultante de un nanohilo, sino también demostrar cómo puede usarse esta técnica para regular la eficiencia termoeléctrica del telururo de estaño en nanohilos de entre 1 y 2 átomos de diámetro.
Este último hallazgo abre un camino a una nueva generación de generadores termoeléctricos, incluyendo la posibilidad de obtener, de entre otros elementos químicos no tóxicos, materiales candidatos para sistemas termoeléctricos.