El Gobierno proyecta una tarifa de IVA del 18% en 2019 y de 17% en 2020, según la propuesta de reforma tributaria que llevará al Congreso esta semana.
José Andrés Romero Tarazona, director de la DIAN, fue quien hizo el anuncio. “Queremos universalizar el IVA para que sea un impuesto mucho más equitativo, compensando a las personas de menores recursos y asegurándonos de que ese IVA que las personas paguen se les pueda compensar mediante un mecanismo eficiente y que realmente funcione”, dijo el funcionario y agregó que “creemos que para poder reactivar la economía, esa tasa tiene que bajar en una primera instancia al 18% y posteriormente al 17% muy rápidamente durante este gobierno”.
Romero dijo que el Gobierno devolverá el IVA a las personas de los estratos bajos mediante un mecanismo parecido al actual Sisbén y que dicho mecanismo “va a garantizar, teniendo en cuenta los diferentes rangos de las familias, su consumo y teniendo en cuenta cuál es el nivel de IVA que ellos deberían estar consumiendo”, dijo.
Romero justificó el proyecto diciendo que en la región casi todos los países tienen una universalidad de IVA y aclaró que al gravar la canasta familiar lo que se está haciendo es “quitando la exclusión” y que unas tres millones de familias serían beneficiadas con la devolución del IVA.
En cuanto al impuesto sobre la renta, el director de la DIAN explicó que las personas naturales con bajos ingresos tendrán una deducción fija que los ayude a establecer una base que consulte su capacidad contributiva; mientras que los de altos ingresos van a tener una carga tributaria adicional del 35% para subir al 37%.
El gobierno espera conseguir los recursos con la reforma tributaria para cubrir el hueco fiscal de $14 billones. “Hay otras iniciativas que nos van a ayudar a recoger mayores impuestos como son las de simplificaciones de los sistemas, facilidades de conciliaciones y transacciones para los pagos, vamos a tener un impuesto de normalización tributaria para que las personas legalicen los patrimonios no declarados que se encuentran en el exterior o en Colombia pero que no están declarados y que no vienen pagando impuestos”.
El funcionario aclaró se creará un impuesto a la riqueza pero que no afectará a las empresas. Será para las personas naturales con patrimonios supriores a los $3.000 millones, lo mismo para quienes ganan más de $50 millones mensuales, “ellas están en capacidad de contribuirle más al país, pero sin afectar a las empresas que son el motor de la economía”.
En la propuesta de reforma fiscal se incluirá el delito de evasión tributaria y hacerlo excarcelable a partir de ciertas cuantías “porque no puede ser un mecanismo para simplemente cobrar” y convertir a la Fiscalía en una especie de “chepito de la DIAN”.
El impuesto a las transacciones financieras se niega a desaparecer. La iniciativa de reforma tributaria contempla que el 4 por mil sea un mecanismo de recaudo el 50% de ese tributo va a ser descontable del impuesto a la renta lo que va a llevar que la tarifa de renta de los microempresarios baje.
Se estima que en Colombia hay 750.000 empresas de $2.800 millones de facturación que se encuentran en la informalidad. Eso quiere decir que hay 250.000 empresas declarantes mientras que 750.000 de ese mismo nivel de ingresos no cumplen con las obligaciones tributarias. “Eso es nocivo para la economía del país, eso contribuye con el contrabando, contribuye y afecta con la informalidad laboral” para atacar ese fenómeno “estamos proponiendo un régimen simple de tributación que incluya el impuesto de industria y comercio, el impuesto de renta que los restaurantes incluya al consumo, que incluya el pago de seguridad social y de las pensiones”.
Por fuera de esa carga tributaria solo se salvarían la salud y los servicios públicos.
Editado de elespectador.com
Imagen: twitter caracol