Golpeando con palo y una varilla porque lo sacó de sus ‘casillas’ Elías Antonio Obregón Acuña, acabó con la vida del menor, Jorge José Rivera Durán.
El niño de 3 años, fue dejado el día de ayer en una vivienda ubicada en la calle 59 con carrera 14, barrio Nuevo Milenio, al cuidado de su padrastro de 18 años.
El menor luego de ser golpeado de forma indiscriminada por el joven y gracias a los vecinos del sector que irrumpieron en la vivienda debido a sus gritos y a los del atacante, fue hallado malherido y llevado al Hospital Materno Infantil de Soledad, donde murió debido a los politraumatismos originados por la golpiza.
La comunidad quiso linchar al agresor, pero la intervención oportuna de la Policía se lo impidió a la turba, que rechazó el hecho.
De acuerdo a testigos la madre del menor de 32 años de edad, quien se encuentra embarazada, había salido de la casa en compañía de sus otros tres hijos para vender los dulces con los que sostiene el hogar y dejó al niño al cuidado de Obregón Acuña.
La pareja al parecer sostuvo una discusión, porque la mujer determinó separarse y era su intención hacer la venta de sus productos y buscar otra pieza para irse a vivir con sus hijos. Según lo explicado por testigos de la pareja de venezolanos, la intolerancia y el consumo de sustancias sicoactivas, determinaron el desenlace fatal de la historia.
El comandante de la Policía Metropolitana, general Mariano Botero Coy dijo por el caso: “Estamos hablando de una persona inhumana que apenas cumple sus 18 años que no sabe el rol de padre. Aquí no hubo sentimiento, no hubo compasión. Aquí lo que hubo fue una agresión total que le causó la muerte a este menor de edad”, dijo el comandante de la Policía Metropolitana.
Foto Mebar