El escándalo de corrupción Odebrecht toma dimensiones insospechadas y salpica los criterios de los procesos relacionados con investigaciones en Colombia.
El Director del Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses, Carlos Eduardo Valdés Moreno, se aparta del cargo por haber informado que la toalla de Pizano tenía sangre humana. “Soy objetivamente el único responsable de haber afirmado a la opinión pública que la mancha de sangre de que trata ese informe era una mancha de sangre humana”, señaló.
Justamente, y en diálogo con RCN Radio, Javier Oviedo, médico presidente del sindicato de Medicina Legal, reiteró sus denuncias sobre irregularidades al interior del instituto. “Desde el comienzo hemos denunciando lo que está pasando con el hoy exdirector, no solo en el caso de Pizano (…) una cosa era lo que teníamos y otra lo que decía el señor Valdés, hay otros casos en los que sucede lo mismo”, señaló Oviedo al referirse a los procesos internos y lo que se exponía de ellos a la opinión pública.
Según el médico, desde el año 2016 el sindicato ha venido haciendo una serie de denuncias en la administración de Carlos Valdés, que fueron hechas ante las respectivas entidades de control.
“Hacemos un llamado para que se den esas investigaciones, porque no es solo esta una de las irregularidades”, manifestó.
Valdés hizo referencia al informe que emitió el laboratorio de Biología Forense de Medicina Legal, el pasado 26 de noviembre, en el que se asegura que la mancha de sangre hallada en una toalla en la casa de Jorge Enrique Pizano era de saliva, y no de sangre como afirmaron la Fiscalía y el mismo director de Medicina Legal.
“Quiero reconocer ante todos, hoy, que solo conocí el texto a mediodía. Este informe tiene toda la validez de los peritos y soy el único responsable de haber afirmado a la opinión pública que la mancha de que trata ese informe era una mancha de sangre humana. Soy el único responsable. Mi equivocación obedeció a que por las características iniciales de la mancha asumí que se trataba de una mancha de sangre”, explicó en declaración que dio desde el búnker de la Fiscalía.
Valdés hizo referencia a que su falta estuvo en no investigar a profundidad los análisis forenses que se hicieron en los laboratorios: “cometí el error de nunca preguntar su origen a los laboratorios, y solamente me concentré en los resultados forenses de si correspondía o no al señor Pizano, y si había o no allí cianuro. El laboratorio solo respondió lo que yo le preguntaba, y no responde más allá de lo que su director le pregunta”.
El informe del que habla Valdés permaneció oculto hasta el mediodía de este jueves cuando la W Radio, en el programa de Vicky Dávila, dio a conocer las cuatro páginas que el laboratorio envió a la Fiscalía 1 seccional Funza, adscrita a la Dirección Seccional de Fiscalías de Cundinamarca, hace casi un mes.
Allí se confirmaba que la mancha en la toalla era de saliva:
“La ausencia de color (lila a morado) se interpreta como Negativo para sangre. La presencia de una banda de color púrpura en la ventana (C) del casete, se interpreta como Negativo para sangre humana. La presencia de dos bandas de color púrpura en la ventana (T) y en la ventana (C) del casete, se interpreta como Positivo para saliva humana”, dice el informe.
Tomado de rcnradio.com y pulzo.com
Foto: Colombia.com