Investigadores del Instituto Technion, en Israel, han desarrollado una técnica que reemplazará al bisturí basada en moléculas biológicas que el cuerpo usa para repararse a sí mismo.
Los bisturíes no distinguen entre tejido sano y enfermo, lo que produce daños innecesarios y aumenta el dolor. El cuerpo usa enzimas para repararse a sí mismo.
La ortodoncia puede alargarse hasta dos años y muchos se someten a una cirugía invasiva en la que se cortan las fibras de colágeno que conectan el diente con el tejido óseo.
La tecnología desarrollada, ablanda las fibras de colágeno por medio de la liberación selectiva de colagenasa, una enzima que rompe específicamente el colágeno. Después de colocarse en el lugar donde se realiza la operación, se aplica calcio para activar la colagenasa. La enzima comienza a filtrarse gradualmente desde el liposoma y ablanda las fibras de colágeno.
El equipo científico comparó el nuevo sistema con el tradicional demostrando reducir a meses el tiempo de tratamiento y minimizando los dolores.
El procedimiento empezará a usarse en humanos hacia el 2020.
Edición: Gustavo Enrique Bossio
Foto: elcuerpo.es