La empresa V.P Global, retiró a los empleados que brindaban seguridad tanto en la sede del Cari Mental como en el de Alta Complejidad y todo porque la gerencia del centro asistencial, debe más de $1.000 millones a la empresa de seguridad.
El presidente de Anthoc, seccional Atlántico, Heriberto Tovar, señaló que es preocupante esta situación, ya que los delincuentes podrían aprovecharse de las circunstancias y ante la ausencia de vigilante el hospital está expuesto a posibles robos.
“La gerencia del Cari tiene una deuda que supera los $1.054 millones, debe 18 facturas desde diciembre del 2016 a septiembre del 2018”, sostuvo el dirigente sindical.
Tovar explicó que la falta de presupuesto del Hospital ha llevado a que no se tenga el personal de vigilancia.
“Ante el retiro de los vigilantes del Cari, se improvisó con el jardinero para que vigile la entrada del hospital Cari”, concluyó.
Texto: José Zuluaga Jiménez. Foto Internet