Un biobot es un robot hecho a partir de células, y 4 científicos estadounidenses de las universidades de Vermont y Tufts han presentado estas máquinas vivientes que abrirían numerosas puertas a la innovación. En este caso, las células son de músculos y piel de la rana africana Xenopus laevis.
Los biobots tienen medio milímetro aproximadamente y el agregado tecnológico fue diseñado por supercomputación para producir varios modelos. Según estos diseños, los biobots serán capaces de realizar diversas tareas. Así, colocadas en cierta posición, las células contráctiles permiten que el biobot se mueva. También permite capturar objetos y pueden acometer tareas en conjunto.
Los biobots son muy resistentes pero desaparecen a la semana, cuando se destruyen sus células, siendo 100% biodegradables.
Los robots biológicos podrán acometer tareas muy eficientemente a una escala mínima y serán relativamente sencillas de programar para, según los autores, detectar tumores, despejar arterias obstruidas o administrar medicinas y, en un futuro lejano, ayudar en microcirugía.
Al ser biodegradables, podrían limpiar de microplásticos el agua y ayudar en la limpieza de terrenos contaminados con tóxicos y aunque estas aplicaciones todavía están lejos de ser realidad, su existencia ya plantea cuestionamientos acerca de las fronteras entre lo que consideramos un ser vivo y un autómata.
Edición: Gustavo Enrique Bossio
Foto: Universidad de Vermont