Tal como como lo había hecho el gobierno nacional, la Corte Constitucional hundió la ley que pretendía reducir la cotización que hacen los pensionados de 12% a un 4% para garantizar su salud.
Esta determinación era entendible y se esperaba en esa dirección si se mira sin apasionamiento la estrecha relación que tienen los fondos privados de pensiones con el Gobierno.
Es por esa razón que no publicaron esta determinación antes de elecciones para que los pensionados y quienes de pronto tienen como objetivo la expectativa de alcanzar esta meta se revelarán y no los apoyarán en las elecciones. Con esta sentencia, tanto el Gobierno como la Justicia desvelan que ellos están al lado de los fondos privados de pensiones y que no les interesa para nada el bienestar de los viejos y pensionados del país.
Eso sí, está medida perjudica por igual tanto a los que no votaron por el presidente electo como a los que votaron por él y los que, como Pilatos, se lavaron las manos y votaron en blanco, pero queda la satisfacción del deber cumplido porque de manera clara se les informó de estas medidas; ahora quienes decidieron en contra de ellos mismos no se pueden quejar.
Y la tragedia no termina ahí, hasta ahora comienza porque entre los anuncios que ha hecho el nuevo gobierno ha mencionado la reforma pensional que implementará para aumentar la edad a 65 años hombres y mujeres, elevar las semanas de cotización, bajar la mesada, eliminar los regímenes especiales, establecer la incompatibilidad entre salario y pensión y crear pensiones por debajo del salario mínimo; esas eran las medidas de la que alertábamos pero bueno, algunos se decidieron por por apoyarlas.
Ahora nos toca en medio de la más absoluta unidad con movilización y lucha tratar de derrotar esas lesivas medidas y otras que implementará el nuevo gobierno en contra de los trabajadores y los pobres de Colombia.
Pero, además, causa mucha preocupación el pronunciamiento de quien se perfila como el más firme candidato para ser ministro de Hacienda, Alberto Carrasquilla, sobre el salario mínimo, del cual dijo: “el salario mínimo en Colombia es un chiste, ridículamente alto, que hay que bajarlo”, Este mensaje, dicho por un personaje que le habla al oído al nuevo presidente, tiene que llenarnos de preocupación y pesimismo sobre el futuro de quienes viven de salario mínimo.
Pero a pesar de estas lamentables medidas contra los trabajadores y los más pobres de Colombia, estoy seguro de que para la consulta contra la corrupción encontraremos a los pobres, a los trabajadores e incluso algunos docentes haciendo campaña y diciendo que hay que votar por el ”NO” porque tenemos que seguir de rodillas apoyando religiosamente a nuestros verdugos.
Esa es la verdadera razón por la cual se oponen a la paz con justicia social, porque al desaparecer las FARC, los elenos, los paramilitares y los corruptos entonces se debe invertir de verdad para acabar con los problemas sociales que nos afectan pero sobre todo obliga a invertir en educación y saben que un pueblo educado no puede ser explotado, por eso no apoyan la paz y mantienen viva la guerra.
Hernando Sánchez Blanco
Secretario General de la Asociación de Educadores del Arauca, ASEDAR
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