Una reciente investigación realizada por científicos australianos, cuya identidad goza de protección, halló que una familia de la bacteria enterococos se ha hecho resistente a ciertos desinfectantes.
En el estudio se analizaron, durante 20 años, 139 cepas diferentes de Enterococcus faecium (foto), encontradas en hospitales australianos. La bacteria se trató con una solución de isopropanol, similar al alcohol que se usa para matar bacterias en los desinfectantes comunes para manos, hallando que las bacterias recolectadas después del 2010 eran 10 veces más resistentes a las soluciones de alcohol y al antibiótico vancomicina que las cepas más antiguas.
Sin desacreditar la eficacia de los desinfectantes para manos a base de alcohol, el estudio sugiere que muchas personas que los usan, no se frotan las manos durante un tiempo lo suficiente como para eliminar por completo a las bacterias. La duración óptima recomendada es de 30 segundos.
A futuro se necesitarán desinfectantes adicionales, más allá de los basados en alcohol, para prevenir la propagación de este peligroso patógeno.
Foto: retroscope.eu