En un área de 40 hectáreas cerca al río Magdalena, en el municipio de Soledad, está ubicada la planta térmica más grande del país que genera 950 megavatios, hoy en producción al 100% para soportar cualquier eventualidad energética nacional.
Al dar a conocer cómo opera este parque térmico en la Costa Caribe y su aporte social en el Atlántico, su presidente, Luis Miguel Fernández, afirmó que “somos un soporte para el sistema eléctrico de la región Caribe y el país con un aporte de energía firme”.
Y lo mejor, agregó el ejecutivo costeño, es que ese respaldo está soportado con gas natural, proveniente de la planta regasificadora ubicada en Mamonal, Cartagena, lo cual ha permitido que “seamos un agente confiable, responsable con el medio ambiente y eficiente”.
Tebsa, conocida antes como Termobarranquilla, es propiedad en un 57% de los fondos de inversión y un 43% de Gecelca, la única generadora de energía que tiene la Costa Caribe, a base de gas natural y ahora con carbón, con dos plantas en Puerto Libertador, Córdoba.
La mayor planta de generación térmica en Colombia, cerró el primer semestre con una disponibilidad del 97% y una capacidad de generación de 959 megavatios (MW), que equivale a un aumento en generación del 12%. De esta manera, la planta cubre el 25% de la demanda de energía en la Costa Caribe y el 6% de la demanda nacional.
El presidente de Tebsa dijo que hay tres pilares que permiten que el sector eléctrico brinde durante los próximos años la confiabilidad y respaldo que necesita la matriz para enfrentar con eficiencia coyunturas críticas como la del fenómeno de El Niño.
Una de ellas es la demanda de energía. En este sentido Fernández sostuvo que la Región Caribe es fundamental para el desarrollo del sistema eléctrico nacional, toda vez que representa un volumen de demanda equivalente al 25% y registró un crecimiento en el consumo del 5% este año, cuando a nivel nacional estuvo esa demanda creciendo apenas al 2,8%.
Según el vocero de la térmica esto es determinante para la expansión. “Es fundamental encontrar soluciones a los problemas financieros y de infraestructura en la distribución que se presentan en la Región, con el fin de que exista un equilibrio entre las tarifas y la calidad del servicio para que la industria en el Caribe sea viable, sostenible y competitiva en el futuro”, añadió.
Tebsa anuncia respaldo a la expansión del sistema, incorporando energías renovables no convencionales a la matriz de generación, pero sugiere tener en cuenta que el país requiere firmeza en su sistema eléctrico debido a la alta exposición a fenómenos climáticos que desencadena oscilaciones y cambios relevantes en la generación hidráulica.
En lo social Tebsa viene adelantando un programa con Actuar Famiempresas, enfocado a las comunidades vecinas del área de influencia de la planta por más de 10 años con excelentes resultados. Destaca el programa TransporArte a través del cual se desarrolla un mural alusivo a Soledad y al maestro Francisco Galán, con apoyo de la comunidad.
Gracias a la ubicación de la planta, desde 1995 a la fecha se han hecho transferencias a la Corporación Regional Autónoma del Atlántico (CRA) y a Soledad la suma de $219 mil millones, que equivale a unos $9 mil 500 millones anuales para los dos entes territoriales. Son recursos que se destinan para proyectos con beneficios ambientales.
Texto y foto: Jorge Montaño Acosta