Dos estudios separados de la Escuela Politécnica de París y de la Universidad de Stanford, llegaron a conclusiones diversas; en uno de ellos, los investigadores compararon las tasas habituales de artritis en las manos de las personas que suelen hacer crujir sus nudillos a menudo con las de aquellos que nunca lo hacen.
En el primero concluyeron que se crea una presión negativa ya que el “estallido” de un nudillo está causado por burbujas que explotan en el líquido sinovial, encargado de lubricar las articulaciones. Sin embargo, el estudio no prueba que chasquear los dedos provoque desgaste en la zona, por lo que no se puede relacionar con la artritis.
El segundo estudio desaconseja este hábito ya que no es saludable debido a que se lesionan tanto tendones como ligamentos, lo que puede llevar a una reducción de la fuerza de agarre a mediano o largo plazo.
Editado de quo.es
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